LA ENTREVISTA CON EL CAP

El pasado jueves mantuve una entrevista de tres horas con el Cap de La Roca. En un ambiente un poco tenso al principio (más por su parte que por la mía) que fue cambiando con el paso de las horas y de ella -la entrevista-, obtuve la siguiente información, que una vez obtenida autorización para relatarla, os explico:
. La demora en las obras del Centro de Santa Agnès se deben a un problema en el suministro eléctrico causado porque la constructora de la obra no fue lo debidamente eficaz (las obras de la índole que sea suelen causar muchos problemas). Que el organismo encargado de solucionar todo el problema (y en solitario) fue el Cap. A mi parecer, aquí las asociaciones no pintamos nada (aunque tengamos la buena voluntad de ayudar) y en todo caso nuestro Ayuntamiento deberia haber ayudado mucho más en la incidencia. Todos sabemos que cuando en una obra hay un organismo público (en este caso la Generalitat) debemos supervisar todo de cerca y prestar especial atención, pues si no se está encima del tema, puede demorarse muchos meses.
Mi reconocimiento público para el Cap (me refiero a su equipo de gestión), pues he podido comprobar que todo ello ha causado más de un dolor de cabeza…
. Que la restructuración médica es debida a reorganización interna y a repartir equitativamente los pacientes de uno y otro médico. Se han movido por tanto unos 2000 usuarios. Que a fin de hacerlo de la manera más neutral posible, sin intención de que nadie saliera perjudicado, se ha encargado la tarea a una empresa informática. Que de todas formas cualquier afectado puede solicitar el cambio de facultativo y que para ello no es/era necesario más que los medios de los que disponian con anterioridad (la solicitud de cambio de médico) . Que la falta de notificación a los usuarios se debia a tres motivos: las empresas de distribución no siempre reparten la tarea encomendada (debido a algún trabajador con poco sentido del deber), que las cartas certificadas no siempre llegan a su destino (que no me arreen ahora los de Correos pues solo me limito a informar a mi vez) y que se colgaron en el Cap carteles informativos que fueron arrancados (¡caramba como es la gente!).
El resto de la conversación se concentró basicamente en explicarme el funcionamiento del Cap y en hacerme saber cuantas cosas buenas ha hecho el Cap a lo largo de estos años e incluso en la actualidad. Información que agradezco en el primer caso, y algo que ya se sobradamente en el segundo. Nunca lo he negado y por el contrario publicamente lo he alabado e insisto en ello.
Las críticas por su parte, se concentraron en las recientes publicaciones “contra el Cap” de los blogs: “La nube de La Roca”, “Crónicas desde Siberia” y este que ustedes leen.
Cuando pedí concretarnos en el nuestro, se me dijo lo siguiente:
. La gente de la Roca ha entendido que la crítica no iba contra el Cap pero nos lee gente de fuera que quizá no hayan comprendido correctamente.
. Que no se valora lo positivo, solo lo negativo.
. Que no he aportado ninguna solución al problema.
. Que solo se pretende dañar al Cap (este comentario era para los tres blogs) y ponemos en peligro a los 54 profesionales que lo componen.
Bien, poco hablé en esa ocasión, pues era más interesante escuchar y ahora les doy mi respuesta, que es la siguiente:
a) Mi comentario fue breve y por tanto no creí necesario hacer una entrada completa en el blog. En ningún momento (y lo hago extensible a los otros dos blogs implicados) ha sido intención perjudicar al Cap, jugarnos el trabajo de nadie, ni tirar por tierra la labor de todos estos años, ni la de los profesionales COMO LA COPA DE UN PINO, que lo integran. Si alguien sabe cuanto ha cambiado el Cap ¡esta soy yo!. Aquellos que llevamos unos años viviendo en La Roca conocemos y valoramos en su justa medida la transformación en positivo de nuestro/s centros de salud. En este aspecto, como en muchos otros, los roqueroles somos unos privilegiados;
b) No valoramos solo lo negativo, ¡esto es incorrecto!, pero cuando “detectamos” un error de forma, corresponde decirlo y en mi caso, tan solo informar a la gente pues ya, sinceramente, me habia cansado de repetir lo mismo una y otra vez a la gente de la calle. Si a ustedes solo les llegan un 10% de las quejas, no quiere decir que no las haya, tan solo que se comentan a pie de calle y no en el centro de salud;
c) No he aportado en mi anterior comentario ninguna solución. ¡Ahí me han dado!. La verdad es que no ofrecí soluciones porque creo que hay mucha otra gente más cualificada que yo para ello, tan solo era mi pretensión, desde la crítica positiva siempre, siempre (con el Cap y con quien sea) –DOGMA DE FE DE ESTE BLOG- hacerselo saber al centro médico (en este caso) y al ciudadano de a pie. Meditando sobre el tema se me ocurren las siguientes posibilidades (además de la carta certificada y la buzonada que ya referido unas lineas más arriba):
. Incluir una hoja explicando el tema en la revista del Centro. Me comentan (en el centro médico y la gente) que tiene amplia difusión e interés,
. Informar a las tiendas,
. Concertar una reunión con los presidentes de las principales asociaciones para que les ayudemos a difundir la noticia (pueden contar con mi ayuda siempre que la precisen),
. Informar telefonicamente y en persona a los usuarios que se acerquen al Cap con un tiempo prudencial de antelación,
. Si todo ello no diere resultado, en último extremo, redactar un nuevo formulario con unas 15 líneas explicativas del asunto, firmado por el Director del Cap y que en la parte inferior del mismo contenga las siguientes preguntas: ¿quiere usted recuperar a su anterior facultativo?, ¿estaria dispuesto en tal caso a cambiar de Cap?, ¿por qué?.
No me hagan caso en extremo, solo son algunas ideas…
d) Nunca ha sido mi pretensión dañar al Cap, ni a las personas que lo componen. Muy por el contrario, les defenderia publicamente si en algo saliesen ustedes perjudicados. Si fuera esa mi pretensión, les aseguro que hay otras medidas más allá de la simple reclamación interna. A su requerimiento de que deje por escrito (en hoja de reclamación) lo ocurrido en recepción, me niego rotundamente. No se trata de que no haya ocurrido tal cual es (y perfectamente explica el Crónicas desde Siberia). Más bien se trata de que no es mi deseo perjudicar a nadie del pueblo y en absoluto al Cap. Menos aún por diferenciaciones políticas (pues ese ha sido el único motivo de las palabras despreciativas de la recepcionista). Un caso aislado que debe ser tomado como tal (y así me lo tomo).
¿Qué si puedo entender que están ustedes “cabreados” y por eso me respondieron así?. Pues no lo entiendo mucho… Cierto es que quizá no les haya gustado la cabecera y el pie de página de mi comentario en “cosas de la Roca”, pero les aseguro que utilicé la ironia por no ser más desagradable, ni más concreta. El pedir paciencia por no ser, ni siquiera era ironia. Creo que nos va a hacer falta si crece la población en La Torreta, ya que, queramos o no, habrá que hacer nuevas restructuraciones ¿me equivoco?. Aunque por lo que he visto, el enfado mayor viene por el comentario de Dani Martín en el Crónicas, ya que fue regidor de Sanidad… ¡y claro, yo estaba allí, representando involuntariamente el pacto PSC+ICV!.
(En mis años de vida laboral –unos pocos- se me ha ocurrido contestar de semejante manera a ningún cliente y puedo asegurarles que “habelos ahínos” de todos los tipos).
Cierto es que no debemos hacer política con el Cap. ¡Eso mismo digo yo!. Informar al pueblo de lo que ocurre y como reaccionar es otra cosa… Que “los gelocatiles no entienden de política”es una apreciación verídica, toda la verdad. Pues bien, los programas y los técnicos informáticos tampoco entienden de personas. No sirven como criterio para un cambio de médico. Es más laborioso, pero más eficaz consultar esa base de datos para, no se… cambiar a las personas que se hayan apuntado al Cap más recientemente, a las más jovenes que por regla general gozan de mejor salud y por tanto tienen menos trato con su médico o aquellas que se hayan visitado en menos ocasiones en el Centro, en los últimos dos años (por proponer algunas ideas).
(Tampoco estaria nada mal que separasen mi persona pública de la física, pues cuando voy en representación de… LO DIGO. De otro modo voy representándome a mí misma. En el Cap, cuando me persono en él, yo nunca, NUNCA, hago política y voy “a por Gelocatiles”. Mezclar lo uno con lo otro es poco acertado. Tengamoslo en cuenta TODOSSS -servidora se incluye en el lote-).
Piensen ustedes que restructurar las máquinas es una cosa, los pacientes otra muy distinta. Para nosotros nuestro médico, es solo nuestro y alguien muy importante… quien conoce nuestras pequeñeces. A nivel practicante la cuestión es similar. En mi caso concreto yo siempre pido a Candido. No se trata de ninguna “descalificación” política, ni personal contra Marta. Candido me conoce hace 15 años y sabe que mis venas son muy finas y que cuando las pinchas se mueven y cuesta Dios y ayuda sacarme sangre. La diferencia entre Candido y cualquier otro/a practicante (sin tener en cuenta ideología, raza, ni sexo) estriba en 3 o 4 pinchazos extra para mí ¿pueden entender entonces que tenga preferencias? (¿Figura tal detalle en el ordenador?). ¡Pues estos u otros detalles les ocurre a muchas otras personas y que nos cambien los facultativos sin avisar no nos parece bien!.
Puedo entender que no les guste lo que leen, pero tienen ustedes todo el derecho del mundo a contestarnos. Este blog, como muchos otros, es un espacio público abierto, compuesto de opiniones (unas veces acertadas y otras no tanto), pero ajeno a mala intención contra nada ni nadie. Jamás les hemos cerrado la puerta y si nuestras apreciaciones son incorrectas, no tienen más que hacernoslo saber!!!... Pero no se confundan, vamos a opinar y “criticar” –si quieren llamarlo ustedes así- siempre que lo creamos oportuno (con el Cap, el Ayuntamiento o el mismisimo Vaticano si se tercia), con la confianza de que no faltamos a la verdad (no voluntariamente), no insultamos a nadie, y procurando ser lo más respetuosos posibles. Si mi comentario les ha ofendido, publicamente les pido disculpas…
Opinar y expresarnos libremente, dentro de las bases del respeto, es un derecho democrático que nos ha costado 40 años de dictadura obtenerlo. ¡No vamos a renunciar a él! (por mucho que se enfaden).
Dos principios básicos de derecho de cualquier ser humano, es el derecho a la información –a obtenerla- y a una defensa adecuada. Por ello mi insistencia y también “mi crítica” (aunque me reafirmo que no era tal). ¡Opinión, señores mios!... OPINION (divino tesoro).
Por último un comentario para la persona con quien tuve la charla: “yo tampoco creo en la atención médica privada”, pese a que la tengo (por una cuestión de rapidez, no por otra cosa). Es curioso, muy curioso que me dijese eso… Le explico: Santi, que me acompañó a la entrevista, vestido con su traje de currante de lo que se siente muy orgulloso, ha pasado buena parte de su vida laboral trabajando en farmacia poniendo inyecciones y elaborando pócimas en la que era propiedad de su padre (mi suegro). Tres personas de la familia trabajaban en ella y otra es enfermera en un importante hospital. Curioso el detalle, como le digo, que todos ellos tienen una mútua privada. Quizá porque conocen la información pública –no mi “crítica”- que difunden los medios informativos (tele, diarios) sobre las listas de espera (que se está luchando enormemente por reducirlas), las horas y horas en urgencias (que opinen en este blog aquellos que las han vivido), las 4 horas que contempla la normativa para la atención de las ambulancias en casos NO URGENTES (experiencia que me ha tocado vivir personalmente con mi padre que falleció de la enfermedad de Alzheimer), etc. Sin ánimo de meterme con la sanidad pública en quien personalmente creo, también PIENSO que les queda mucho camino por recorrer para mejorar todo lo debido. En ese aspecto me percato que La Roca va favorablemente, unos cuantos km adelantada. ¡Por ello siempre he/hemos tenido en alta estima a nuestro Cap!.
Me consta que el proceder del centro, en el caso que nos atañe, fue un acto de absoluta buena fe, de verse obligado a hacerlo de una forma u otra y pensando en nuestro bien y no en perjudicarnos, pero sin pensar que no se trata tan solo de que “los facultativos son un equipo de trabajo coordinado y con datos reflejados en un ordenador”. Somos personas, ¡algo difícil de coordinar ya de por sí!.
En cualquier caso, la buena fe, para mí, EXIME AL CAP de cualquier culpa, por tanto firmaré el cambio de médico aunque esté en desacuerdo –añado a la buena fe, también mi plena confianza en los facultativos- a la espera de que todo quede en un malentendido. Lamentablemente me consta que un proceder honrado y lleno de buena intención, se ha liado convirtiéndose en lo que no es. Por mi parte, todo olvidado.
Un saludo cordial y mi reconocimiento personal al Director del Cap. Balbina
P.D: (Comentario político, ajeno al funcionamiento del cap, irónico y friki para Maria Llerdà, en respuesta a su comentario en el foro sobre lo ocurrido en el centro y mi indumentaria de color rojo): Maria, reina, como iba al Cap en son de paz, aunque olvidé en casa la bandera blanca ¡mecachis, que despiste!, no fui vestida de “rojo, revolucionario, hereje y rebelde” que es lo que soy. Y A MUCHISIMA HONRA. Reservo la ropa de ese color, tras tu apreciación, para las situaciones que se presenten “belicosas” como por ejemplo los plenos (aquí y en la China… ), donde de ahora en adelante siempre podrás verme aparecer “abanderada” con ese color. ¡Recuerdos a Carod!.
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